viernes, 30 de enero de 2009

HISTORIA DE LA FABRICACION DE HORMAS EN ESPAÑA

Como ya se ha he dicho en otras ocasiones, la historia de la fabricación de hormas en España y especialmente en la Comunidad Valenciana, es paralela a la de la familia Aguado de Elda, ya que ésta fue la iniciadora en el año 1870 de la fabricación en serie y llegando a nuestros días de forma ininterrumpida y a través de varias generaciones de la familia. Al principio, en la mitad de la década del siglo XIX, el Sr. Aguado, zapatero de profesión, se las ingeniaba para preparar a mano sus propias hormas y cada una para un pie (cabe destacar que en aquella época era frecuente utilizar una misma horma para los dos pies).

En el año 1870, con el primer torno de procedencia americana, se inicia en la comarca del Medio Vinalopó la fabricación de hormas en serie; primero con la marca Isidro Aguado y poco a poco se fueron incluyendo más tornos en diferentes fábricas y se pasó de 10.000 pares al año en la década 1.870-1.880 a 120.000 pares en 1.920; aparecen otras industrias en la provincia de Alicante y en total se alcanzan los 200.000 pares de producción en 1.960, con un paréntesis en los años de la guerra civil. Las hormas fabricadas en la Comunidad Valenciana empiezan a inundar los mercados españoles a partir de final del siglo XIX, llegando a otros lugares en los que se fabricaba calzado, especialmente a las Islas Baleares, Norte de España y Andalucía; al final de la década de 1.980, la producción total de hormas en la Comunidad alcanzaría 1.300.000 pares al año, con 19 fábricas distribuidas en diferentes puntos de nuestra geografía: Elda, Elche, Villena, Sax, Aspe y Vall de Uxó.

Durante la primera década de los años 60, aparecen los tornos de un par y aquellos iniciales de un pie son sustituidos inmediatamente para dar paso a estos otros que darían un renovado impulso al sector, es un periodo en el que se incide con mayor fuerza en los mercados internacionales y la horma comienza a exportarse de forma generalizada.
Al año 2000 se llega con 26 fábricas de hormas en la Comunidad y una producción que supera los 1.650.000 pares de hormas; de aquella primera fábrica de Aguado, se había pasado a un número importante de industrias de fabricación de la horma, pero con un nexo común, todas ellas habían pasado de forma directa o indirecta por los talleres de Aguado, incluso esa misma industria adquirió otros nombres para sus modernas sociedades: Eurohorma, Hermanos Aguado, Eurolast, entre otras; pero es justo reconocer que en esos años 2000 se había llegado en un momento de máximos históricos en la fabricación de hormas, habían otras industrias en la Comunidad Valenciana que dieron y dan gran prestigio a las hormas españolas, destacando: Eurohorma; H. Aguado; H. Beneit; Obrador; Indaca; Maestre; Verdú hermanos; Garrigós, Pepe Herrero, todos ubicados en Elda. Eurolast; Hormera Ilicitana; Formes; Hormaplast; Barceló; Bonaforma; Román y Aroldo, en Elche. Aguilera en Sax. Hormas Sarrió y Hormas Barceló en Villena; Babiana Valera, Aroldo; Mariano Valera en Aspe y Hormas Monovar en Monovar.

Desde la aparición de las hormas de inyección en la década de los años 60, todo había cambiado, las modernas máquinas de inyección de tarugos producían el tocho para ser trabajado en las fábricas de hormas (algunas fabricaban también el tarugo de plástico) con máquinas adaptadas a estos materiales y tornos reproductores de más pares de hormas y mucho más rápidos.

Los últimos años han supuesto un paréntesis en la creciente fabricación de hormas, llegando al año 2007 con un ligero descenso del número de fábricas en la Comunidad, en total ahora hay 20 fábricas y la producción ha bajado a los 900.000 pares, esto naturalmente ha corrido en paralelo al sector de fabricación del calzado. Sin embargo el tratamiento del modelaje a dado un paso de gigante en los últimos 10 años, la firma italiana New-Last saca al mercado un digitalizador (escaneador) de hormas y un torno de control numérico hasta de tres pares; la firma española, creada por el grupo Aguado en España, lanza en nuestro país y para todo el mundo un Kit completo de digitalización que revoluciona la fabricación conocida hasta esos momentos.

La tecnología en la fabricación de hormas en los dos últimos siglos, ha sufrido una trepidante transformación que ha afectado de forma muy sensible a la propia fabricación de calzado, dando mayor precisión y fiabilidad a los ajustes y dotando a este esencial molde de una mayor versatilidad que tanto ha beneficiado a la adaptación de la moda del calzado en cada época.

Como resumen digamos que hasta el siglo XVIII las hormas se realizan enteramente a mano auxiliados de raspas, desbarbadotes y otros utensilios; a mediados del siglo XIX, aparecen las primeras copiadoras que reproducen pieza a pieza los diferentes modelos, a estas máquinas se les aplicaría más tarde un cambio de rotación, consiguiendo de esta forma el pie izquierdo (pie contrario). A principios del siglo XX se fabrica la máquina de un pie incorporando dos pantógrafos para largos y anchos. La revolución de la tecnología en hormas viene de la mano de la firma americana Gilman que con una máquina sencilla de par consigue que la mayoría de fábricas en Europa la adapten (incluso hoy pueden verse algunas de estas máquinas trabajando). Rápidamente surge en Alemania la máquina de un par se la que se venden miles de ejemplares en todo el mundo; sin embargo es Italia en pleno siglo XX quien da un definitivo impulso al sector con la máquina fabricada por Doncella, con total exactitud de ajuste para dos pares; esta versión dominará los mercados tras la 2ª guerra mundial.

En el último tercio del siglo XX, la firma americana Jones and Vining, consigue crear el digitalizador de hormas (escáner en tres dimensiones) y el torno numérico aprovechando la estructura de Doncella (Foto 10); a partir de ahí se perfecciona el sistema con digitalizadores verticales y mayor rapidez y precisión. En el año 2000, la firma española Horma 2000 (dependiente del grupo Aguado), comercializa un revolucionario digitalizador para la modificación de la horma y un novedoso programa para tornos de control numérico.

1 comentario:

Anónimo dijo...

Profesor José María Amat, le felcito por este interesante espacio creado, le escribo desde el Ecuador, quisiera contactarme con usted, trabajo para una naciente revista de calzado en mi ciudad, Guayaquil, desearía poder publicar algunos de sus escritos - de ser posible- que puedan aportar a esta gran industria, le dejo mi correo espero su respuesta.
redaccionlahorma@hotmail.com
Muchas gracias